El olimpo y valhalla vuelven a juntarse en esta última entrega de God of War, donde la cinematografía se junta sin problemas con las masacre y como no, la mitología.
Mucha agua – y cadáveres – han pasado desde que God of War llegó a las consolas a mediados del 2000. Un título que puso otra vez de moda el mundo de los dioses griegos y que a punta de espadazos se alzó como uno de los nombres más importantes para la querida PS2.
Ahora nos encontramos con un título que recoge los cambios en la jugabilidad de la versión anterior y que en PS5 se logran mostrar de la mejor manera, sin dejar de lado la historia y esa brutalidad con que Kratos nos conquistó.
Sin Spoilers
Gracias PlayStation pudimos acceder al juego previo a su lanzamiento y podemos entregarte una reseña sin spoilers del juego, el que creo puede transformarse en esa señal final que necesitabas para tener la PS5, ya que el título de Santa Monica le hace toda justicia a la consola.
Han pasado algunos años desde los sucesos de God of War (4) y nos encontramos a un Atreus crecido, pero que sigue manteniendo esa inocencia y con ribetes propios de un adolescente, lo que será una arma de doble filo cuando el llamado de Loki continue fuerte y claro, desencadenando – junto a otros sucesos – el Fimbulvetr que ocurre antes de la destrucción de los mundos, el Ragnarok.
Los dos protagonistas esta vez tendrán que hacer diferentes viajes, donde la historia tendrá su fuerza ya que entre ambos la relación se va intensificando con un Kratos que desea, muchas veces de forma secreta, ser un buen padre o modelo a seguir para su hijo, el que por otro lado quiere seguir su camino. Se hace muy natural la relación entre ambos, algo que los grandes títulos de PS han sabido demostrar e incluso traspasan la pantalla.
Para nuevos y viejos jugadores
Cuando comienzas el título puedes ver un resumen de lo que ha sido la saga, lo cual sirve para ayuda memoria para quienes lo jugamos hace años, mientras que para los nuevos jugadores será una forma muy breve y concisa de mostrar lo que Kratos ha realizado en estos más de 20 años desde el primer título.
Pero una vez terminado el resumen el juego comienza rápidamente, no hay mucho tiempo para hacer una curva de aprendizaje y en cuestión de minutos ya estás enfrentando a un par de enemigos que según el nivel de dificultad pueden hacerte la vida imposible.
Aquí siento que hay una buena mejora en la narrativa del título comparado con otras entregas y es que si bien tienes pocos segundos para manejar los ataques y defensas, todo el manejo del control es muy fluido y las combinaciones que puedes hacer se sienten muy naturales. Punto a favor y que siempre que puedo destaco: el control de PS5 es exquisito y aquí el Dualsence se luce 100%.
La brújula para mi siempre ha sido un tema porque a título muy personal nunca me gustó, pero sé que la mayoría la disfruta y la agradece, en especial quienes buscan descubrir todos los misterios del juego. Puedo adelantarte que estopa de regreso y que si, será muy útil.
¿Entonces?
Este es un juego “vendeconsolas” y en algún momento debatí con un amigo sobre cual era más importante, Si GOW o TLOU, pero, siendo muy amarilla, creo que ambos títulos son necesarios en tu colección de Play. Pueden apuntar a públicos distintos, pero de que están bien logrados, lo están. De hecho mi única critica al juego es que en lo personal soy muy purista con respecto a la mitología griega, pero ver en la pantalla como griegos y nórdicos chocan entre sí, tiene algo de atractivo.
Si tienes una TV con HDMI 2.1 podrás llegar, en PS5, a los 120HZ y en ese momento te vas a dar cuenta lo mucho que se avanzado en la calidad gráfica que podemos disfrutar y que este es un excelente título para disfrutar de esta tecnología.